BILBAO
Monumento 29 de Bilbao. La escultura muestra una cabeza de la muerte, que lleva aretes y una corbata anudada en el cuello, una característica del Gobernante 2. Altura: 94 cm.
Sitio arqueológico ubicado en Santa Lucía Cotzumalguapa (Escuintla), en terrenos de la Finca Las Ilusiones. Está a una altura de 400 metros sobre el nivel del mar. Hacia 1820, fue visitado por el viajero francés Jean Frederic Maximilien de Waldeck, que denominó al sitio Cotzumalguapa y elaboró dibujos que se encuentran en la Newberry Library de Chicago. En noviembre de 1860, al ser derribados árboles para la siembra de almácigos de café, Pedro de Anda, propietario de la Finca “Peor es Nada”, descubrió las ruinas y monumentos de Bilbao, los que por medio del Embajador de Estados Unidos en Guatemala, Elisha O. Crosby, dio a conocer en 1861 en la American Ethnological Society. En 1863, Simeon J. Habel, viajero y médico, investigó el sitio. En 1865, el Presidente Rafael Carrera envió a Miguel Urrutia a levantar planos y elaborar un informe. En abril de 1876, el doctor Adolph Bastian, del Real Museo de Berlín, estuvo en Bilbao para conseguir algunas esculturas. Para ello recurrió a los servicios del Doctor Karl Hermann Berendt. Dichas esculturas fueron exhibidas en Hamburgo, con ocasión del Cuarto Centenario del Descubrimiento de América. Gustavo Eisen estudió las esculturas del sitio y las de la finca Pantaleón, de Manuel Herrera. El arqueólogo e historiador alemán Eduardo Seler* publicó un estudio de las esculturas de Santa Lucía Cotzumalguapa que se encuentran en el Real Museo de Berlín. Otros científicos que han visitado el sitio han sido Thomas Gann (1939), Walter Krickeberg (1958 y 1961); J. Eric S. Thompson, Franz Termer, Edwin M. Shook (1965), Stephan F. de Borhegyi y José Antonio Villacorta Calderón y su hijo Carlos. El sitio fue investigado, en 1962 y 1963, por un proyecto del Museo Público de Milwaukee. En el sitio se descubrió una plaza monumental, templos, esculturas, piedras de moler, cuchillos de obsidiana, espejos de pirita, figurillas, cabezas colosales, yugos, esferas de piedra, hachas y esculturas decoradas en relieve. Su ocupación se inició en el Preclásico y continuó durante el Clásico y Postclásico. Con los sitios El Baúl y El Castillo, formó una grande y extensa ocupación durante el Clásico Tardío. Los tres comparten el mismo tipo de cerámica, e igual estilo escultórico, característico de la zona, al que se le conoce como “cotzumalguapa”.
Bibliografía: Osvaldo Chinchilla, “La ciudad clásica de Cotzumalguapa”. Ciudades Mesoamericanas (Guatemala: Universidad Mesoamericana, 2012).