ÁLVAREZ ALFONSO ROSICA DE CALDAS, SEBASTIÁN
Firma de Sebastián Álvarez Alfonso Rosica de Caldas.
(1610-1673). Caballero de la Orden de Santiago, Regidor de León (España) y Presidente de la Audiencia de Guatemala (18/1/1667-29/10/1670). Nació en Caldas (León, España), el 20 de enero de 1610. Sus padres fueron Blas Álvarez Alfonso Rosica de Caldas y Victoria Álvarez Quiroz de Reyero. Llegó acompañado de dos sobrinos, un nieto y 17 familiares. A pesar de la oposición del Oidor Juan de Gárate y Francia y el Fiscal Pedro de Miranda Santillán, el Oidor Decano Sebastián Caballero de Medina le entregó el cargo de Presidente. Durante su Gobierno, envió el 30 de enero de 1667 al Rey Carlos II un proyecto de conquista del Lacandón; contra el parecer de los oidores de la Audiencia, viajó a Granada (Nicaragua), en compañía del Alcalde Ordinario Pedro de Roa y el regidor Luis López de Andravide, para reconocer el Castillo de San Carlos (Río San Juan, Nicaragua) y estudiar la conveniencia de trasladarlo a otro lugar; y entregó en 1667 la administración del Hospital de San Alejo a los Hermanos de San Juan de Dios (AGCA, A172, leg. 6065, exp. 54999, fol. 17v). En 1668, solicitó sin éxito el restablecimiento de los Jueces de Milpas* (AGCA, A123, leg. 1519, fol. 200). Contribuyó a que en julio de 1669 la catedral fuera derribada y se iniciara su reedificación, laborando como albañil en sus ratos libres. Logró que se colocaran los cimientos y el levantado de las paredes alcanzaran tres varas. En reconocimiento de lo que trabajó en la fábrica de la Iglesia Catedral, el Cabildo Eclesiástico mandó colocar su estatua en la Capilla de San Pedro de la nueva Iglesia, con esta inscripción: Dominus Sebastianus Alvarez Alfonso Rosica de Caldas, hujus Regalis, Cancellariae Praeses, harum Provinciarum Generalis Dux, quem tota istius famigerati templi fabrica funditus Instauratorem clamat. Por el delito de baratería, ordenó encarcelar en el Castillo de San Felipe a Pedro de Miranda Santillán, Fiscal de la Audiencia de Guatemala. Por este hecho, el 6 de mayo de 1670, la Reina Gobernadora nombró Juez de Residencia al Obispo Juan de Sancto Mathía Sáenz de Mañozca, lo que se hizo efectivo el 29 de octubre de 1670 (AGCA, A123, leg. 4580, fol. 256; A130, leg. 1732, exp. 11550). El Presidente se refugió en Patulul, donde vivió cerca de año y medio. El Juez de Residencia nombró al Oidor Jacinto Roldán de la Cueva para que investigara la actuación del Presidente durante su viaje a Nicaragua. Como resultado de la pesquisa, informó que en la villa de San Miguel (El Salvador) el Presidente se sirvió de los indígenas y no les pagó, otorgó cargos sin autorización y jugaba al dado y naipes en su residencia. El Ayuntamiento de Santiago Guatemala salió en defensa del Presidente y recomendó para el puesto de Fiscal a Carlos Coronado y Ulloa, vecino prominente de la ciudad. A solicitud del bachiller en medicina Juan de Alarcón, el 8 de febrero de 1672 el Presidente Mañozca y Murillo autorizó a Álvarez Alfonso Rosica de Caldas trasladarse a Panajachel. El 5 de marzo de 1672 ingresó gravemente enfermo al Hospital del Hermano Pedro. Murió el 31 de enero de 1673, en casa de José de Aguilar y Rebolledo. Sus albaceas fueron Sancho Álvarez de las Asturias que era su familiar, Bernardo Antonio de Valdés y José de Aguilar y Rebolledo. Fue enterrado en la iglesia de la Compañía de Jesús, donde se colocó su estatua funeraria.