ALVARADO, PEDRO DE
Retrato de Pedro de Alvarado (1808). Pintura realizada por Juan José Rosales. Se encuentra en el Salón de Sesiones de la Municipalidad de Guatemala. En 1854 fue restaurada por Delfina Luna.
(1485-1541). Conquistador de México y de Guatemala, y Caballero de la Orden de Santiago. Nació en Badajoz (Extremadura, España). Sus padres fueron Gómez de Alvarado y Mexía, hermano del Comendador de Lobón Diego de Alvarado, y Leonor de Contreras. Llegó a La Española (Santo Domingo), alrededor de 1510, en compañía, según algunas fuentes, de sus hermanos Jorge, Gonzalo, Gómez y Juan; de ahí se trasladaron a Cuba. Llevaba en su equipaje las ropas de su tío Diego de Alvarado (?-1493), el Comendador. Participó en las expediciones que hicieron Juan de Grijalva (1518) y Hernán Cortés (1519) al litoral de Yucatán. En Veracruz, al formarse el primer Cabildo, fue nombrado Capitán de Entradas. Los mexicas lo llamaron Tonatiuh (hijo del Sol) debido a su piel rubicunda y cabello rubio.
Cortés le obsequió a la princesa Luisa de Xicoténcatl, hija del Señor de Tlaxcala. Alvarado la recibió in facie ecclesiae y procreó con ella dos hijos: Pedro y Leonor. En 1520, durante la conquista de los mexicas, cuando Cortés fue a enfrentar al ejército comandado por Pánfilo de Narváez, quedó a cargo de un destacamento militar hispano en Tenochtitlan. En esa ocasión, durante la gran fiesta de Tóxcatl, en honor de Huitzilopochtli, creyendo que los mexicas preparaban un ataque, ordenó matar a varios líderes en el templo mayor, lo que provocó una violenta sublevación que le obligó a abandonar la isla, lo que se conoció como la Noche Triste. El año siguiente, participó en el sitio de Tenochtitlan (1521).
Durante 1522 dirigió una expedición a la costa del Pacífico de México. El año siguiente Cortés lo envió al mando de una fuerza militar contra el señorío quiché de Gumarcaaj o Utatlán. Derrotó al ejército quiché en las batallas de El Pinar y Llanos de Urbina. En la primera, Tecum, jefe de las fuerzas indígenas, cayó en combate. Luego se dirigió a Gumarcaah o Utatlán, invitado por sus señores pero, temeroso de una traición, incendió a la ciudad y a los señores Oxib Queh y Beleheb Tzi. Desde ahí, el 11 de abril de 1524, envió una Carta Relación a Cortés. Luego, con la ayuda de los cakchiqueles, recorrió las aldeas de los alrededores para hacer prisioneros y esclavizarlos. Concluido el sometimiento de los quichés, se trasladó a Iximché y de ahí partió a Chuitinamit, ciudad situada a la orilla del Lago Atitlán, capital de los tzutujiles, enemigos de los cakchiqueles. Después de vencerlos, regresó a Iximché.
A los pocos días inició una expedición hacia Cuscatlán (El Salvador). En el trayecto, incendió el pueblo pipil de Panatacat o Izcuintepeque (Escuintla, Guatemala), cuyos señores eran rivales de los cakchiqueles, derrotó a población xinca de Guazacapán, y atravesó el Río Paz, con un ejército formado por alrededor de 250 españoles y 6,000 indios auxiliares (entre tlaxcaltecas, mexicas y cakchiqueles). El 8 de junio de 1524, en las proximidades de Acajutla, libró una sangrienta batalla, en la que recibió un flechazo en una pierna que lo tuvo al borde de la muerte, lo dejó cojo de por vida y le obligó a utilizar un zapato con suela más gruesa. Llegó a Cuscatlán, el 17 de junio de 1524, pero no pudo someter a sus gobernantes, porque se habían internado en las montañas con los soldados. Regresó a mediados de julio a Iximché, y fundó Santiago de Guatemala, el 27 de julio de 1524. Inmediatamente, los cakchiqueles iniciaron una insurrección por los abusos a que los españoles los sometieran. Ésta se prolongó hasta 1530. En 1526 fue a Honduras llamado por Cortés.
Durante su primer viaje a España, en 1527, logró el apoyo del Duque de Alburquerque y consiguió que le dieran en matrimonio a su sobrina Francisca de la Cueva, quien falleció en 1528, poco tiempo después de arribar a Veracruz (México). Ese mismo año, fue sometido al primer Juicio de Residencia. En 1530 tomó posesión como Adelantado y Gobernador de Chiapas y Guatemala. El 18 de junio de 1532, el Ayuntamiento le concedió un salto de agua para la construcción de un molino, el cual estaba junto al asentamiento de los tlaxcaltecas (Libro Segundo de Cabildo, 2018: 65-66). Ese mismo año, la Corona española le autorizó realizar una expedición al Pacífico. Sin embargo, contrariando el contenido de la capitulación, en 1534, se dirigió al Perú y después de atravesar Los Andes, en Ecuador, cerca de Quito, cedió a Diego de Almagro sus tropas, entre ellas indígenas cakchiqueles. Retornó a Guatemala a principios de junio de 1535. El 17 de junio de 1535, las autoridades edilicias le reclamaron que no estaba cumpliendo con la merced real hecha a la ciudad para que se pudiera herrar a los esclavos (Libro Segundo de Cabildo, 2018: 140). El 16 de julio de 1535, el Adelantado Pedro de Alvarado ofreció ser garante y fiador de su hermano, ante cualquier reclamo que surgiera después que partiera de retorno a México (Libro Segundo de Cabildo, 2018: 141-142). El año siguiente, al enterarse que la Audiencia de México había ordenado se le realizara otro juicio de residencia, emprendió nuevo viaje a España. A su paso por Honduras, fundó San Pedro Sula y Gracias a Dios. Durante su estancia en la Península Ibérica, contrajo matrimonio con su cuñada Doña Beatriz de la Cueva. El 4 de abril de 1539, Viernes Santo, desembarcó en Puerto Caballo (Honduras), acompañado de su segunda esposa, y una nueva capitulación que le autorizaba una expedición a La Especiería. Desde dicho puerto, escribió al Ayuntamiento de Santiago de Guatemala, solicitando enviaran dos regidores y un alcalde para presentarle las provisiones que traía de Gobernador. Le respondieron que sólo si el Rey se los mandaba lo harían (Libro Segundo de Cabildo, 2018: 280-281). Comenzó a organizar de inmediato la expedición a La Especiería en los astilleros de Istapa y Acajutla. El 16 de septiembre de 1539, presentó a las autoridades edilicias una provisión y real cédula (9/8/1538) que le nombraban Gobernador de Guatemala por siete años, con un salario anual de 562,500 maravedís; y ordenaban al Juez de Residencia, Alonso de Maldonado, no poner impedimento alguno, ya que no se habían encontrado culpas por la que mereciera ser privado del cargo (Segundo Libro de Cabildo, 2018: 291-296).
Al zarpar hacia las Molucas, a finales de 1540, llevaba a sus esclavos negros, indígenas y 50 caballos. Le acompañaron también castellanos llegados de Nueva España, Honduras, Nicaragua y Perú. En Nueva España, entró en negocios con el virrey. Además, se enteró que Fray Marcos de Niza había incursionado en las siete ciudades de Cíbola, localizadas imaginariamente hacia el norte de México. Al tener noticia de una rebelión en la zona de Jalisco, decidió participar en su pacificación. Durante un combate, en el Peñol de Nochistlán, resbaló el caballo del escribano Baltazar Montoya, que le cayó encima, arrastrándolo por una ladera. Como consecuencia de los golpes y heridas, falleció en la Villa de la Purificación (Guadalajara, México), el 4 de julio de 1541, en casa de su parienta Magdalena de Alvarado. Según Bernal Díaz del Castillo, posteriormente Juan de Alvarado lo trasladó a Chiribitío. El Obispo Francisco Marroquín cumplió con sus disposiciones testamentarias. En 1568 su cadáver fue trasladado a Santiago de Guatemala, ciudad asentada en Panchoy, y se le enterró en la Catedral, donde los restos de su viuda también fueron inhumados. Juan Díaz de la Calle le dedicó el siguiente epitafio: Yaze en este angosto monumento el que merecía más Augusto, que fue para la Nobilissima Ciudad de Guatimala, lo que para Roma Rómulo; El famoso por la virtud de su valor y vitorias Don Pedro de Alvarado, del Ábito de Santiago, Adelantado, Gobernador, Fundador y Poblador desta Ilustrissima Ciudad de Guatimala. Que la dio Templos, Leyes, Costumbres y Ritos. Después de haber deshecho en muchas batallas el engaño de la Idolatría, poniendo para siempre cessacion en su Altares y Aras. Pasó a la inmortalidad de que ya goza en el Año 1541. En el Archivo General de Centro América se encuentra un documento con árboles genealógicos de sus ascendientes y descendientes (AGCA, A32, leg. 23, exp. 415).
Bibliografía: Adrián Recinos, Pedro de Alvarado, Conquistador de México y Guatemala (México: FCE, 1952). José Fernando Ramírez, Procesos de Residencia, Instruidos Contra Pedro de Alvarado y Nuño de Guzmán (México: Valdés y Redondas, 1847).